Llueve sobre la ciudad

¿Por qué los días lluviosos o el otoño los relacionamos más con la tristeza que con la felicidad? ¿Será porque las tonalidades van de grises a negro? De acuerdo a  la teoría del color, el gris puede provocar depresión y soledad, es un color frío y melancólico. Quizá sentimos que el tiempo pasa más lento y estamos más meditabundos y concentrados en asuntos personales.

La lluvia afecta de distintas maneras a las personas, algunas se ponen reflexivas, otras nostálgicas, muchas optan por el romanticismo y una buena parte se siente algo triste.

Mientras para algunos la lluvia les produce tristeza o incluso aburrimiento, otros la disfrutan y les hace pasar momentos alegres y placenteros. Es la oportunidad para quedarse en casa disfrutando de la familia, los hijos, la pareja o dedicar un tiempo a sí mismo, a solas. Ver una película, beber algo caliente, leer, escuchar música, dormir mientras se oye de fondo el caer del agua.

Hay quienes gozan de dar un paseo bajo la lluvia protegidos por un paraguas o sentir cómo gota a gota se va empapando su vestimenta hasta no quedar ni una parte seca. La lluvia puede ser el pretexto perfecto para caminar al lado del ser amado y darle el toque romántico.

Varios músicos, compositores, cantantes, bandas y solistas han dedicado un tema a la lluvia relacionándola con situaciones de pareja, con la desilusión, la soledad, la depresión. Como ejemplos encontramos varios: “Llueve sobre mojado” de Fito Paéz y Joaquín Sabina, “Esta tarde vi llover” de Armando Manzanero, “Gotas de lluvia” interpretada por Enrique Guzmán, “Llueve sobre la ciudad” de Los Bunkers, todas hablan de las relaciones de pareja, del amor y desamor, de la pérdida, el abandono, de la abrumadora monotonía.

Moby le dedica “Raining Again”, por su parte Travis se pregunta “Why Does It Always Rain On Me?” Blind Melon le da otro toque más optimista con la canción “No Rain”, o que tal The Jesus and Mary Chain que son felices cuando llueve “Happy When It's Rain”, y la lista podría seguir, pero sólo es para darnos una  idea de cómo la lluvia ha sido motivo de inspiración en terrenos de la música, y en cuestiones más nostálgicas.

No sólo los músicos, también escritores, pintores y artistas de diversas disciplinas han dedicado su obra a este estado del clima.  Tal es el caso del artista ruso-israelí Leonid Afremov quien plasma sus diferentes estados de humor y emociones en sus nostálgicas pinturas al óleo.

Afremov utiliza el óleo, el lienzo y la espátula para expresar su sentir por medio de cada trazo. Sus pinturas aunque conllevan una dosis de nostalgia, no utiliza una colorimetría oscura, por el contrario para él no hay días grises, la lluvia es un raudal de colores, aromas y sensaciones, contrastes, mucha luz, reflejos, texturas. Muestra a solitarios o enamorados que pasean por las calles de la ciudad o en medio de un parque mientras llueve.

Sus cuadros dan la impresión de ralentizar el tiempo para permitirnos contemplar los preciosos detalles y la atmósfera cromática de estas ciudades otoñales y de los días lluviosos.

En su obra Leonid retrata sus experiencias de vida, temas cotidianos, representa el día a día de manera espontánea y directa. Refleja y contrasta los colores de los objetos circundantes en las zonas de penumbra. Tal como una obra de la corriente impresionista.

Si quieren conocer más de la obra de Leonid Afremov visiten su sitio dando click sobre su nombre y apellido.